Cuenta la tradición que en 1469 el pastor Rodrigo de Balzategui, natural de Oñate (Guipúzcoa), se hallaba cuidando su rebaño de cabras en la montaña de Aloya, cuando encontró entre unos espinos "una devota imagen de la Virgen María, de pequeña proporción, con la figura de su hijo precioso en los brazos, y una campana, a manera de grande cencerro, al lado". Al verla, el humilde pastor exclamó: "¡Arantzan zu!", que en vasco quiere decir 'Tú en el espino'. De ahí el nombre de ...