Hijo de unos payeses (campesinos) que tenían muy poco dinero, Jacint Verdaguer acudió a la escuela pública de su pueblo. Allí pronto destacó por su inteligencia y su vocación religiosa, por lo que, al cumplir los diez años, ingresó en el Seminario.
Desde muy joven escribía versos en catalán, y en 1865 ganó un importante concurso de poemas de Barcelona. El joven Jacint fue a recoger el premio vestido como un campesino de su comarca, lo que causó gran asombro. Era su forma de llamar la atención ...