Los pólipos y las medusas, llamados cnidarios, son animales invertebrados marinos que pueden presentar tanto formas de vida libre (medusas) como formas inmóviles (pólipos). A los pólipos pertenecen organismos como las anémonas o los corales.

Los poríferos son conocidos comúnmente con el nombre de esponjas. A pesar de su aspecto de vegetal, se trata de animales invertebrados, en su gran mayoría marinos, que viven formando grandes colonias. Generalmente, muestran colores brillantes o blanquecinos y tonos que van desde el azul hasta el rojo.

Los pulgones son insectos de pequeño tamaño. Tienen 3 pares de patas y 2 antenas sensoriales. Suelen ser grises o negros pero también pueden ser de otros colores, como el rojo o el verde.

El pulpo es un animal marino. Su cuerpo es blando y tiene 8 tentáculos con ventosas, que utiliza para capturar a sus presas. Hay especies que miden 2 cm y otras que llegan a medir 1 metro de longitud. Su cabeza es muy grande y tiene dos ojos de gran tamaño. Su piel puede cambiar de color y textura para confundirse con el fondo del mar.

El saltamontes es un insecto robusto y de forma alargada que mide unos 2 cm. Posee dos pares de alas, unas membranosas y otras duras. Las patas posteriores son muy largas y adaptadas para el salto. Tiene antenas cortas.

La sanguijuela es un animal invertebrado de la familia de los gusanos. Su cuerpo es alargado y plano. Puede medir hasta 45 cm de longitud. Tiene dos ventosas en los extremos para sujetarse. Es de color negro y algunas razas tienen una boca con varias filas de dientes muy pequeños.

La tenia es un gusano aplanado que puede alcanzar los 3 m de longitud. Su cuerpo está formado por una cabeza con órganos de fijación y varios segmentos que se repiten.

Las termitas son insectos parecidos a las hormigas pero de mayor tamaño. Algunas razas pueden medir hasta 3 cm. Excepto la reina, no tienen alas. Su cuerpo es blando y de color anaranjado. Tienen 3 pares de patas y dos antenas.